El exalcalde de Culiacán y diputado federal electo, Héctor Melesio Cuén Ojeda, fue asesinado la noche del 25 de julio en un ataque armado en una gasolinera de La Presita, Sinaloa, pocas horas después de que Ismael “El Mayo” Zambada fuera arrestado en Estados Unidos.
Cuén Ojeda tuvo una destacada carrera, comenzando como profesor y rector de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS). Posteriormente, incursionó en la política como diputado estatal, secretario de Salud de Sinaloa, alcalde de Culiacán, candidato a gobernador, y senador. Fue también fundador del Partido Sinaloense (PAS) y recientemente había obtenido una diputación federal plurinominal por el PRI.
Según la Fiscalía General de Sinaloa, el principal testigo del hecho es Fausto “N”, hijo de Víctor Antonio Corrales Burgueño, exrector de la UAS y actual presidente del PAS. Fausto acompañaba a Cuén, quien no podía manejar debido a una cirugía reciente. Ambos viajaban en un vehículo Ford Raptor blanco, año 2024, hacia una finca para una reunión legal. Al no presentarse los abogados, decidieron regresar a la ciudad.
Durante el trayecto de vuelta, se detuvieron en una gasolinera en La Presita para cargar combustible. Dos hombres en motocicleta se acercaron al vehículo, y uno de ellos intentó robar la camioneta. Tras un forcejeo, se escucharon disparos. Fausto “N” trasladó a Cuén a una clínica particular, donde el exalcalde falleció minutos antes de la medianoche.
Investigación y Causa de Muerte
La Fiscalía inició una investigación por homicidio doloso. Según el reporte de la Dirección de Servicios Periciales, Cuén murió por choque hipovolémico secundario debido a una significativa pérdida de sangre, ya que un proyectil laceró la arteria poplítea derecha, arteria principal que corre por detrás de la rodilla. Además, presentaba cuatro heridas de bala en las piernas y tres heridas por esquirlas.
El 29 de julio, periodistas reportaron el testimonio de un antiguo miembro de la seguridad de “El Mayo” Zambada, sugiriendo que Cuén Ojeda podría haber estado involucrado en una emboscada contra el capo, quien fue secuestrado y trasladado a Estados Unidos. La titular de la Fiscalía de Sinaloa, Sara Bruna Quiñónez Estrada, afirmó en una conferencia de prensa que no se descarta ninguna línea de investigación y se están realizando todas las diligencias necesarias para esclarecer los hechos y llevar a los responsables ante la justicia.
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